jueves, 23 de enero de 2025

A014 MINISTERIO PUTREFACTO

 

 

Llega a declarar que el general Ferrándiz, no dice la verdad y que algunos expedientes además de tachones se encuentran que les faltas hojas. Y acusa al ministerio de que existe 200.000 pesetas fuera de caja sin justificación alguna.

***

La Correspondencia de España, 18 de julio de 1904 (1)


ORGANISMO EN DESCOMPOSICION

EL MINISTERIO DE MARINA

Decía el general Ferrándiz que en su tiempo no habianse realizado actos contrarios a la ley, y el general Ferrándiz se equivoca. Se convierten verdaderas “polacadas”.

Tenga paciencia, y ya se convencerá de que ha cometido polacadas sin cuento en asuntos de grandísima importancia y que redundan en desprestigio de algo que está por encima de las pasioncillas personales. Cuando hablemos de las almadrabas, demostraremos que el general Ferrándiz afirma cosas contrarias a la verdad de los hechos y que en los expedientes hay tales borrones, que en otro país hubiesen producido varios procesamientos, pues se da hasta el caso de haber desaparecido folios, según nota de pundonorosos oficiales que en ellos informaron.

Pero no involucremos y vayamos por partes, pues como ayer decíamos, el método y la claridad son convenientes para el mejor esclarecimiento de la verdad.

Hoy nos ocuparemos del personal, para convencer al general Ferrándiz de que en la Armada hay dos castas. Un noventa por ciento de víctimas y un diez por ciento por ciento de niños mimados.

¿Es falso, por ventura, que el tiempo de mando en las capitanías generales es de dos años, según mandato de la ley? ¿Es, acaso, inexacto que el Sr. Ramos Izquierdo, íntimo amigo de los contratistas de la limpieza de los caños de la Carraca y del Sr. Auñón, máximo cacique gaditano? cumplió los dos años en el mes de noviembre pasado?

Las dos interrogaciones anteriores no tienen contestación posible. El general Ferrándiz sabe que el Sr. Ramos Izquierdo no puede ser capitán general de Cádiz que falta a la ley, que comete una polacada, que perjudica a los contraalmirantes Guerra y Sostoa, los cuales no tenían destino y habían solicitado el cargo; pero todo eso le tiene sin cuidado, y como en Marina es costumbre burlarse de reglamentos, sostiene su amigo en el disfrute antilegal del codiciado cargo.

¿Quiere el señor ministro cargo más concreto, mayor arbitrariedad, descomposición orgánica?

Aún hay más, mucho más, que no por ya ser conocido pierde un átomo de su gravedad. El general Cámara se entera un día de que su fe de bautismo verdadera le asigna dos años más que la empleada para ingresar en el Cuerpo, y solicita su pese a la reserva por haber cumplido su edad reglamentaria. Era un caso de conciencia, pues perjudicaba á sus compañeros, y Cámara cumplió con su deber.

Pero en el ministerio pensaron lo contrario para perjudicar á ciertos generales poco dóciles a la voluntad ministerial, y Cámara, a pesar de tener la edad reglamentaria para pasar a la reserva, continuo en activo, por la razón sencilla de que el ministerio es la casa de Tócame Roque, y alli no hay leyes, ni nada que no sea el capricho y la voluntad ministerial.

Protesto el general Fernández de Celis, al cual se le postergaba injustamente; pero todo fue en vano.

¿Qué sucedió con la vacante del general Navarro? Pues sucedió que, a pesar de los mandatos de la ley, no se cubrió la vacante, con el solo objeto se dilatar el ascenso del Sr Concas, marino de veras, que tiene brillantísima hoja marinera y militar, razón sobradísima para no ser gratis a quienes ni han navegado ni se han batido.

El Cuerpo General y el de Infantería de Marina son los únicos que sufren los rigores de los ministros.

En cambio, el Cuerpo Jurídico y el de Administración-el que asesora y el que paga - tienen desde la guerra cuanto quieren, dándose el caso de que señores que eran paisanos al comenzar la guerra sean hoy comandantes, mientras tenientes de navío con cuarenta años de servicio no consiguen ascender.¿Cree el ministro que los ascensos en el Cuerpo Jurídico el de Archiveros ha sido justos? pues nosotros afirmamos que son ilegales, habiendo sido barrenada la ley, como lo ha sido al ordenar el aumento de un general en la plantilla del Cuerno de Sanidad, sin más objeto que el de sentir a un amigo bien recomendado.

 Compare el ministro los Estados Generales de la Armada de los años 1901 a 1904, y se convencerá de que el ministerio está en completa descomposición. imperando en él el capricho y la inmoralidad, razones sobradísimas para que sea defendido el criterio de suprimirlo.

¡El personal del Ministerio! ¿Qué sabe el ministro de unas 200.000 pesetas que existen fuera de Caja? ¿Sabe de dónde proceden? ¿Conoce a qué son destinadas?

Pues si no lo sabe, le diremos que el hecho es cierto y que se da el escandaloso caso de haberse hecho un corte de cuentas abusivo, sin justificación, dejando fuera de Caja cantidades que debieron ser formalizadas con arreglo a las leyes de Contabilidad.

La ley de duración de destinos está conculcada: la de pase a la reserva, escarnecida; la de ascensos, olvidada; la de amortización no se cumple con los favoritos; la de gratificaciones es interpretada caprichosamente; la de retiros se falsea; la de plantillas se escarnece; la de Contabilidad no se cumple. ¿Quiere el Sr. Ferrándiz mayor desbarajuste? ¿Quieren nuestros lectores mayores pruebas de que el tal ministerio es un pandemónium, en donde solamente imperan el desconcierto y el favoritismo?

Los casos Arderins, Ramos Izquierdo, Navarro, Concas. Fernandez de Celis, Cámara, Cuerpo Jurídico, Cuerpo de Archiveros y Caja, son casos concretos y no necesitamos exponer otros, pues nuestro propósito es tan sólo demostrar lo que decimos, y para la demostración basta con un solo caso de cada clase.

Si el ministro quiere, le hablaremos de marinos que con escasos días de mar disfrutan siempre los cargos más cómodos y productivos; de otros marinos de brillante historia enviados siempre a los destinos peores; de las comandancias de los barcos; de los destinos de los arsenales, de cien infamias cometidas por quienes debían amar los prestigios del Cuerpo y abominar de las intrigas políticas.

Tenga paciencia el antiguo comandante del Pelayo, del único barco de combate que no podrá ir à Cuba, el antiguo capitán del puerto de Santander, hoy ministro de Marina. Y si la tiene, nosotros le probaremos que su decoro le obliga a dimitir y que la honra nacional exige una desinfección enérgica en el ministerio de Marina.

Ayer demostramos con datos oficiales, abrumadores, aplastantes que en el asunto de los carbones existían vergonzosos latrocinios; hoy hemos demostrado en lo referente a personal es escarnecida la ley a diario, y mañana probaremos que en la burocracia, en el expedienteo de ese ministerio hay cosas y casos inconcebibles, abusos y falsedades que necesitan ser estudiados por una Comisión parlamentaria; medio único de poner coto al abuso, freno a los egoísmos y castigo a los delitos.

No se canse el ministro. Su ministerio esta putrefacto. 

Juan de Aragón.

(1) https://prensahistorica.mcu.es/es/inicio/inicio.do

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

COMPROMETER LA PAZ DEL ESTADO POR GIBRALTAR

  Una instrucción   por el Juzgado de Instrucción del Distrito de Palacio de Madrid contra Leopoldo Romeo Sanz, natural de Zaragoza, direct...